LOS MOTIVOS DE LA CAÍDA DE WHATSAPP, FACEBOOK E INSTAGRAM

La informática, como la vida misma, está en continuo cambio, evolución y adaptación a nuevos actores o situaciones que aparecen. Por eso mismo, predecir el futuro es algo extremadamente complicado. Y más si nos centramos en algo tan incierto como los virus o el malware, que siempre va por delante de la legalidad y la capacidad de actuación.

En este artículo vamos a ver las opiniones de varios expertos en ciberseguridad. Ellos nos darán a conocer sus ideas e impresiones sobre cómo evolucionará el software maligno durante un futuro a corto-medio plazo.

El primero de ellos es Antonio Fernandes, experto en ciberseguridad. Antonio reconoce que es muy complicado predecir esta evolución, pero apuesta por la especialización de los “malos” por sectores. De esta forma, los hackers tomarían distintas vías de actuación: unos atacarían a gobiernos, otros a un determinado sector comercial, otros a industrias…

Sin embargo, Fernandes cree que puede haber un nexo común entre todos estos malhechores, y esto es que la mayoría de ataques podrán ir dirigidos contra las cadenas de suministros. Y, ¿qué significa esto? Pues que los ataques irán a empresa que gestionan datos o información reservada de terceros. Esto puede ser datos bancarios, de uso, información personal… de terceras personas o entidades.

Antonio Fernandes también ve posible el uso de malware para influir en la opinión pública, a través de las llamadas guerras de opinión. Estas tienen como objetivo favorecer a unos determinados sectores, normalmente socioeconómicos, que buscan desestabilizar a otros para hacerse con el poder. Actualmente esta guerra sucia ya la podemos ver por canales como las redes sociales.

Josep Albors, investigador de ciberseguridad en ESET, coincide con Fernandes en que es imposible predecir, incluso a corto plazo, cómo será la evolución del malware. Sí tiene clara una cosa: hay que fijarse en las técnicas usadas por los hackers durante los últimos años y ver cómo han evolucionado a partir de las mismas, sin realizar grandes cambios en los ataques. Más bien perfeccionando las técnicas usadas. Albors cree que los atacantes usarán dichas técnicas pero evolucionadas, con capacidad de ataques modulares o en fases, para dificultar la detección de los virus.

En cuanto a la cadena de suministro, Albors coincide con Fernandes en que estas recibirán más ataques aún de los que reciben en la actualidad debido a la ausencia de políticas de seguridad para hacer frente a esas amenazas externas.

También cree que, desgraciadamente, puede aparecer nuevas formas de ocultación que hagan casi imposible la labor de identificación de los grupos que atacan, pudiendo ser de regiones o ubicaciones muy diferentes al lugar donde reside el ente atacado.

Finalmente, Lorenzo Martínez, fundador y CEO de Securízame, apuesta más por las acciones actuales como las operaciones de robo y cifrado de información y la posterior pedida de rescates económicos. Martínez apuesta por este tipo de delitos por la rentabilidad que se obtiene a partir de acciones “fáciles” para los hackers debido a los problemas y faltas de seguridad que tienen muchas empresas e instituciones. Para más inri, Lorenzo Martínez pronostica que el malware utilizado para tales fines serán más sofisticado aún, impidiendo en muchos casos la identificación de los delincuentes. Estos tendrán capacidad, posiblemente, de acceder no solo a la información del equipo atacado, sino también a la que está alrededor del mismo.

Por eso, queridos lectores, hemos de estar siempre al tanto de la seguridad de nuestros equipos, intentando protegerlos al máximo para evitar que los delincuentes cibernéticos entren en nuestros equipos personales o de nuestras empresas y sustraigan datos de vital interés.

¡Nunca deis nada por sentado ni por seguro en internet!